Fauno
Pertenece a la mitología romana. Era el equivalente del dios PAN griego. Era una divinidad protectora de los rebaños,
a los que multiplicaba y defendía de los lobos. Tenía el don de profetizar, y su principal santuario era el Lupercal
en el Palatino. Sus fiestas eran Lupercalias, aunque se le adoraba también en en las Faunalia de primavera y de
invierno. Su personalidad acabó por disolverse y en lugar de un dios Fauno, pasó a haber una legión de Faunos que
eran unas divinidades menores que pululaban por los montes romanos.

A unas canias, sepulcro de Siringa
Este frondoso honor, esta esculpida lamina verde en marmol animada, sepulcro es, piedad acreditada,
que pastor feliz presto acogida. Siringa, ninfa un tiempo suspendida hoy fistula de tronco
que, animada, mudo es trofeo, pompa venerada del que ya muerto logra mejor vida. Sobre la
urna esta compadecido coro de ninfas, de la ninfa fiera, el rigor en sus plectros repartido.
Y por que muerta ya su voz no muera, ultimando su acento dolorido, Eco la lleva a toda ribera.
Don Juan de Tassis y Peralta, Conde de Villamediana
|
 |
|
|
 |
PAN y siringa

Titulo: Pan y Siringa (1635) Autor: Nicolas Poussin Museo: Staatliche Dresden
siringa
Era una ninfa de la Arcadia que desdeniaba a cuantos faunos, stiros y silenos la pretendian, y que se dedicaba a cazar con
un arco de cuerno. El dios Pan la encontro un dia en que Siringa bajaba del monte Liceo, la vio y al punto se enamoro
de ella lanzandose en su persecucion. Siringa en su huida llego al arroyo Ladon y alli suplico a sus hermanas las
ninfas que la socorrieran. Estas, conmovidas, la convirtieron en canias y cuando Pan llego al lugar no pudo
mas que abrazar a un puniado de canutillos huecos en los que Siringa se habia convertido, y cuyo rumor le agrado tanto que
desde ese momento decidio adaptar sus armonias musicales a ellos, y construir con ellos un nuevo instrumento, una flauta que
llevo el nombre de la ninfa: Siringa. Se contaba que cerca de Efeso se encontraba situada la gruta en la que Pan
haba dejado la primera Siringa o flauta de nueve tubos, asi es que la muchacha que afirmaba ser virgen era encerrada en aquella
gruta, y si era verdad que lo era, la siringa dejaba oir sus melodias, tras lo cual la puerta se abria sola y la joven aparecia
coronada de ramas de pino. Caso contrario se oian gritos funebres y cuando se abria la puerta la joven haba desaparecido.
|
 |
|
|
|